Tanto intérpretes como compositores tienden a resaltar el sonido pleno y evocador de las obras del compositor francés Claude Debussy cuando hablan de su influyente catálogo. Una vez empieces a aprender su música con el piano, entenderás por qué. Ya tengas vasta experiencia con el piano o simplemente estés empezando, el estilo delicado y onírico de Debussy tiene la extraña capacidad de llegar a lo más profundo de tu alma. 

Debussy ya estaba predestinado a hacer carrera en el mundo de la música a la temprana edad de nueve años, cuando su excepcional talento con el piano se hizo evidente. Criado en un suburbio pobre de París, llamó la atención de una millonaria rusa, Nadezhda Filarétovna von Meck, que lo contrató para tocar a dúo con sus hijos. 

En las décadas siguientes, Debussy escribió las que posteriormente se convertirían en algunas de las composiciones más reconocidas de todos los tiempos. Entre ellas se incluye el famoso Claro de luna, imprescindible para pianistas de todos los niveles, junto con clásicos como Dos arabescos, La nieve danza y Serenata para la muñeca; todos ellos disponibles para aprender a través de flowkey.

Abajo encontrarás 10 de nuestras piezas favoritas de Debussy. Independientemente de su nivel, animamos a cualquier pianista a sumergirse y experimentar el conmovedor sonido de este entrañable compositor.

1. Claro de luna

Una favorita para las bandas sonoras, famosa por su profunda emotividad y su evocadora belleza

Casi seguro que ya has oído esta pieza antes. ¿Por que no intentas ahora tocarla? Compuesta entre 1890 y 1905, Claro de luna es una muestra fundamental del estilo impresionista de Debussy que mezcla expresivas melodías con ricas armonías. Es por eso que se ha utilizado para realzar la carga emocional de escenas clave en innumerables superproducciones cinematográficas, la más reciente de las cuales ha sido Todo a la vez en todas partes.

El título de la pieza capta perfectamente su atmósfera etérea y melancólica. Disponible en flowkey en cuatro niveles de dificultad, Claro de luna ha sido la puerta de entrada al mundo del piano para millones de personas. Aunque sus intrincados pasajes pueden suponer un reto, aprender esta pieza es una oportunidad para transmitir emociones profundas a través de la música.

2. Arabesque No. 1 – Deux Arabesques

Una mezcla equilibrada de estructura y expresión

La primera sección de Dos arabescos de Debussy destaca en un catálogo repleto de joyas atemporales. Terminada en 1888, ejemplifica el estilo impresionista temprano de Debussy, mezclando la forma clásica con un estilo inspirado en la arquitectura árabe. 

Si bien suena delicada y ensoñadora, la versión de flowkey es más recomendable para pianistas con experiencia. El sonido etéreo de la obertura conduce a un final en cascada que invita a explorar el delicado equilibrio entre estructura y libertad expresiva al interpretarla.

3. Des pas sur la neige

La banda sonora de un paisaje invernal desierto

Des pas sur la neige (Pasos en la nieve) captura la calma de un paisaje invernal desierto. El ritmo lento y pausado evoca la imagen que sugiere su título, creando una atmósfera conmovedora e introspectiva. También puede haber un toque de melancolía en sus esponjosos acordes.

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¡No te dejes intimidar por la etiqueta "Avanzado" del arreglo de esta pieza en flowkey! Gracias a su ritmo lento, es una de las piezas más fáciles de aprender de la lista. Debussy indicó que había que tocarla "íntimamente", lo que comprenderás una vez que te pongas manos a la obra con ella.

4. La fille aux cheveux de lin

Inspiración romántica

Seguramente ya te habrás dado cuenta de que Debussy se inspiraba en el mundo exterior a la hora de componer. La fille aux cheveux de lin (La niña de los cabellos de lino) es un poema escrito por Leconte de Lisle
en 1852 acerca de una mujer de cabellos dorados cuya belleza resplandecía bajo el sol del verano. Debussy intentó captar la esencia de este poema en su composición para piano del mismo nombre, lo que explica el sonido brillante y alegre de la pieza.

Hay cierta elegancia en su sonido atmosférico y en su forma de transmitir el carácter positivo del poema. A pesar de su ritmo apacible, La fille aux cheveux de lin obliga a cualquiera que la toque al uso de los cinco sentidos, exigiendo una cuidadosa atención al trabajo de acordes y pedales, en particular; pero el resultado merece la pena.

5. Reflets dans l’eau

Arpegios intrincados y melodías en cascada

El agua no es algo que asociemos habitualmente con la música de piano, pero Debussy encontró la manera de hacer que ambas cosas encajaran de algún modo. El Reflets dans l’eau (Reflejos en el agua), Debussy hace uso de intrincados arpegios y melodías en cascada para imitar los reflejos brillantes y cambiantes de la superficie del agua. 

Reflets dans l’eau exige una destreza delicada al tocar, ya que sus arpegios y la distancia que tiene que abarcar la mano pueden suponer un reto técnico; pero con tiempo y práctica, serás capaz de tocarla sin problemas.

6. The Snow Is Dancing

Una pieza hipnótica y repetitiva

Hay algo en el invierno que saca a relucir lo mejor de Debussy, algo que The Snow Is Dancing (La nieve danza) deja clarísimo. En esta pieza hipnótica y repetitiva, Debussy evoca la imagen de los copos de nieve bailando, utilizando texturas delicadas y ligeras para transmitir la ligereza de la nieve al caer.

The Snow Is Dancing está más bien pensada para pianistas con un nivel avanzado. Debido a su ritmo enérgico, recomendamos practicar a un tempo lento para empezar, prestando mucha atención a la precisión y la expresión. Esto te ayudará a construir una base sólida y a descubrir los matices de esta maravillosa pieza a medida que alcanzas la velocidad máxima.

7. Et la lune descend sur le temple qui fut

Inspirada en la música de la isla de Java en Indonesia

Esta pieza, como gran parte de la obra de Debussy, se asocia con el movimiento impresionista; haciendo hincapié en la atmósfera, el color y la textura por encima de las estructuras armónicas y melódicas tradicionales. El uso de escalas pentatónicas y de tonos enteros, así como de armonías paralelas, genera una atmósfera propia de otro mundo.

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Al componer la pieza, Debussy se fijó en la música de Java, que escuchó interpretada en París durante la Exposición Universal de 1900. Eso explica el sonido único de Et la lune descend sur le temple qui fut (Y la luna desciende sobre el templo que fue), que la versión de flowkey capta a la perfección. 

8. La plus que lente

El sonido de un café parisino del siglo XX

La plus que lente, traducido como "El más que lento", es un encantador vals compuesto por Debussy en 1910. Es más alegre que muchas de sus piezas y podría evocar imágenes de un café parisino del siglo XX, o incluso de un salón de baile. También hay un toque de jazz en su sonido juguetón.

Quienes estén aprendiendo a tocar el piano no deben dejarse engañar por el ritmo pausado y la atmósfera de la pieza. La nota "molto rubato con morbidezza" de su obertura propicia una libertad rítmica unida a una tierna contención que atraerá a intérpretes con más experiencia. Si acabas de empezar, te recomendamos probar primero algunos valses más sencillos (quizá nuestras versiones para niveles Principiante o Intermedio del Vals n.º 19 o El Danubio azul) antes de enfrentarte a esta desafiante pieza.

9. Voiles – Preludio n.º 2, L. 117

Acordes evocadores y texturas delicadas

Es fácil imaginar Voiles como la banda sonora de algún thriller de espías. La maestría armónica de Debussy queda plasmada en esta pieza, que emplea texturas delicadas y acordes ricos y evocadores para crear una sensación de introspección y nostalgia, ¿y quizá de misterio? 

Hay muchas oportunidades para explorar el efecto de su rango dinámico, sus múltiples capas y el pedaleo al tocar esta pieza, y para descubrir cómo tus decisiones influyen en el estado de ánimo que transmite. Abórdala con paciencia y prestando atención a los pequeños detalles para obtener un magnífico resultado. 

10. Serenade for the Doll

Una de las canciones más divertidas de Debussy

Los niños han inspirado algunas de las canciones más queridas de todos los tiempos, ya sean de Johnny Cash o de Bob Marley. La Serenata para la muñeca es la entrada de Debussy en ese canon: pieza dedicada a su hija, Chouchou. Compuesta en 1908, la pieza sigue siendo una joya encantadora, que encierra la gracia y la maravilla de la infancia en su sonido juguetón.

Serenade for the Doll puede ser una de las canciones más divertidas para tocar de esta lista, especialmente en su deslumbrante sección inicial. Al igual que con gran parte del catálogo de Debussy, practicarla de manera lenta y precisa es fundamental para dar en el clavo con la dinámica y los cambios de ánimo de esta conmovedora pieza.

Toca la música que amas con flowkey

Aprender a tocar tus piezas favoritas de Claude Debussy te ayudará a alcanzar tus objetivos y hará tu aprendizaje de piano mucho más ameno. Al fin y al cabo, es más fácil mantener la motivación cuando tocas la música que te gusta.

¿Ya te mueres de ganas por aprender a tocar alguna de estas piezas de Debussy? Accede a los tutoriales completos y explora el catálogo de flowkey, disponible en versión de escritorio y para dispositivos móviles.